Pollo a la "Josefina"

Esta es una receta de esas que me trasladan a mi niñez. Cuando era más pequeña, muchos domingos iba con mis padres y mis hermanas  a comer a casa de unos tíos a los que adorábamos. Ella, Josefina, siempre nos ofrecía con alguna variación, el mismo menú: carne guisada para mi padre, que sabía lo muchísimo que le gustaba, y pollo.

Cocinaba un pollo con una receta muy original, era pollo con chorizo, y como era una receta inventada por ella, empezamos a llamaro así: pollo a la "Josefina".

Años después, ya de mayor, le pregunté el porqué de aquella receta, y ella me dijo que empezó a cocinar así el pollo, precisamente para comerse el chorizo, y disfrazarle un poco el sabor al pollo, porque no era santo de su devoción.

Poco a poco vio que todos nos tirábamos en plancha al chorizo, y aumentó la cantidad...así nació este sencillo y delicioso plato.

Ingredientes:

- un pollo cortado para guisar (yo le quito la piel)
- 3 ajos picados
- uno o dos chorizos
- vino blanco
- sal
- aceite de oliva

Preparación:

Comenzamos por salar el pollo y adobarlo con el ajo bien picado.

Ponemos a calentar tres cucharadas de aceite en una sartén amplia y vamos dorando el pollo, junto con las rodajas de chorizo.

Cuando ya lo tengamos bien dorado, lo sacamos a una tartera, y cuando hayamos dorado todo el pollo, echamos el vino blanco, que lo cubra casi, y un poco de agua.

Dejamos que el pollo cueza a fuego suave hasta que veamos que está tierno.

Mientras, vamos preparando unas patatas para compañar y una ensalada.

Servimos bien caliente.

Más fácil imposible.

Os aseguro que en casa les gustó muchísimo. Ayer mi pequeña volvió a pedirme "ese pollo que comías cuando eras pequeña..."