martes, 26 de febrero de 2013

Marañuelas

Siempre que hago marañuelas, los recuerdos que tengo son de los veranos de mi infancia, y adolescencia en Luanco, un pueblo marinero en los que pasé momentos divertidísimos. También me recuerdan muchísimo a mi abuela, ahora que ya no está, tanto por que le encantaban, y siempre me decía que eran como las de Luanco, como porque la última vez que las hice, se las lleve para que se las tomara con café...

Estas delicias que os traigo son unas galletas típicas de esa zona, en cuyas confiterías las hacen absolutamente irresistibles.



Son unas galletas que endurecen al enfriarse, con una mezcla de sabor entre mantequilla, anís y limón, perfectas para desayunar, con el café de media tarde, o qué queréis que os diga, para cualquier momento del día.

Yo las hago con Thermomix, pero podéis amasarlas con cualquier batidora de ganchos, no os las perdáis, absolutamente recomendables.

A por ellas:

Ingredientes:

- 5 yemas
- 1 huevo entero
- medio cubilete de anís dulce
- 125 grs de mantequilla
- 2 cubiletes y medio de azúcar
- ralladura de limón
- 1 sobre levadura en polvo
- 500 grs de harina, más la que necesitemos a la hora de trabajarlas.

Preparación:

Precalentamos el horno a 200º.

Ponemos en el vaso de la Thermomix el azúcar y la ralladura de limón y lo pulverizamos a velocidad 5-7-9, progresivamente.

Incorporamos las yemas, el huevo, la mantequilla y el anís, y programamos 1 minuto, velocidad 6.

Echamos la levadura, y la mitad del harina, y mezclamos 15 segundos  en velocidad 6.

Incorporamos el resto de la harina, y programamos 35 segundos,  velocidad 5, y si es preciso nos ayudamos un poco con la espátula.

Sobre una encimera enharinada, sacamos la masa, que es pegajosa, con las manos enharinadas, y vamos formando una especie de rosquillas como las de la foto, aunque realmente las marañuelas tiene típica forma de "ocho". Incorporamos la harina que necesitemos para poder manejar la pasta.

La vamos colocando sobre una bandeja de horno, forrada con papel vegetal, y las horneamos unos 12 minutos, a 200º. Estarán listas cuando se doren.



Al acabar el tiempo, retirarlas con cuidado con ayuda de una espátula, y dejarlas enfriar, vereis que endurecen, y queda la típica galleta de la costa marinera del norte de  Asturias y que resulta deliciosa.

Mañana para desayunar marañuelas...

 

sábado, 23 de febrero de 2013

Pan de cereales y semillas


Toca receta de pan, de mis preferidas, y concretamente ésta me encanta: una mezcla de harinas y semillas para conseguir una auténtica delicia.

Basada en las nociones que aprendí de Xavier Barriga, a través de los libros que tengo sobre como hacer pan, conseguí esta maravilla que veis aquí. Son absolutamente adictivos, y para mi las estrellas de mi horno, cada día me gusta más hacer pan, si tuviera más tiempo lo haría a diario...

No hay excusas para no hacerlo en cuanto tengáis un momento, los fines de semana, y es que en cuanto le coges el punto, es una gozada ver como fermenta, como huele al hornear, y lo delicioso que sabe.

Ingredientes:

- 375 grs de harina de fuerza
- 50 grs de harina integral de centeno
- 75 grs de harina de escanda ( espelta)
- 10 grs de sal
- 5 grs de azúcar moreno
- 350 grs de agua
- 10 grs de levadura fresca
- 125 grs de semillas (amapola, pipas de girasol, de calabaza, copos de avena, sésamo, pasas incluso...)

Preparación:

Ponemos en un bol grande todos los ingredientes de la receta, salvo la levadura y el agua. Comenzaremos a añadir el agua y remover la masa con la mano, mientras con la otra sujetamos el recipiente para que no nos baile.

Agregamos agua según la masa se vaya secando hasta incorporar toda la de la receta.

Cuando la masa haya absorbido toda el agua y forme una especie de engrudo la sacamos del bol y la depositamos sobre una superficie previamene enharinada.

Seguimos amasando nuestra masa, doblándola sobre sí misma atrapando aire para que se oxigene, repitiendo estos movimientos hasta que la masa se vaya despegando de la mesa.

En cuanto veamos que la masa se rompe, y desgarra la estirarla, la tapamos con un paño húmedo y la dejamos reposar durante 10 minutos.

Repetimos esta operación unas 5 veces más, siempre con sus descansos.

Cuando la masa adquiera un aspecto liso, incorporamos la levadura y un poquito de agua dentro de la masa, en su centro. Echaremos también más de la mitad de la mezcla de semillas preparada.

Seguiremos amasando hasta que la masa esté totalmente disuelta y obtengamos de nuevo una masa lisa y que se despegue perfectamente de la mesa.

Dejaremos reposar la masa obtenida unos 30 minutos para que fermente, tapada con un paño húmedo.

Coartaremos piezas de 50 grs cada una más o menos y formamos barritas con un poco de punta. Las mojamos con un pulverizador de agua. Y si quereis como yo, les haceis unos cortes en diagonal sobre la superficie, con un cuchillo muy afilado, o cúter.

En una bandeja plana colocamos el resto de semillas y rebozamos en ellas las barritas y las colocamos en una bandeja de horno previamente forrada con papel vegetal.

Las tapamos de nuevo con el paño húmedo y las dejamos de nuevo reposar unos 75 minutos mientras precalentamos el horno a 250º.

Antes de meter el pan en el horno lo volveremos a rociar con el pulverizador de agua y lo coceremos unos 24 minutos a 200º.


Puede parecer algo difícil de hacer, pero es una gozada amasar a mano; siempre podéis hacerlo con una batidora de ganchos si os es más fácil, no hay problema.

Os dejo  una de las recetas VIP en mi blog, cómo me gusta hacer pan...

 

martes, 19 de febrero de 2013

Pisto de calabaza



Me gusta muchísimo el pisto, el clásico plato de verduras cortaditas con tomate, cebolla, pimiento, calabacín y berenjena. Simplemente con un huevo frito, que era como se comía en casa de mis padres, me parece un  bocado ideal, y me trae recuerdo siempre de mi madre, porque ella lo prepara como nadie.

Pues ahora, como es tiempo de calabazas, os traigo otra versión del clásico plato: pisto de calabaza, acompañado como en casa: con huevos fritos.

No tiene ninguna complicación, lo más engorroso del plato es ir contando las verduras en dados más o menos similares, para que no sólo el sabor sea increíble, sino también su aspecto y presencia.


Es ideal acompañado de huevos como os lo presento hoy, pero este pisto tiene un montón de posibilidades: con pasta o arroz, acompañado de carne o pescado, como relleno de empanadas o empanadillas, como rellenos de lasaña o canelones...mil ideas para probar y ponerse a ello de inmediato, así que a cocinar!

Ingredientes:

- 400 grs de calabaza limpia, pelada
- un calabacín
- un pimiento rojo
- 2 tomates grandes maduros
- 1 berenjena
- un  puerro grande
- 3 cucharadas soperas de aceite
- sal
- pimienta

Preparación:

Lo primero es preparar la berenjena para que no amargue, ni nos estropee el plato: la pelamos, cortamos en dados y ponemos en un escurridor de verduras con un poco de sal para que vaya soltando el amargor.

Mientras, vamos pelando la calabaza, cortándola en dados, lo mismo con el pimiento, y el puerro.

Pelamos los tomates, y el calabacín, y los troceamos.

Ponemos en una sartén amplia, o wok, 3 cucharadas de aceite a calentar, e incorporamos el puerro, dándole unas vueltas para que se empiece a dorar.

Incorporamos el pimiento y la calabaza, dejamos que se pochen un poco, y añadimos el calabacín, el tomate y la berenjena, previamente pasada por agua y escurrida.

Salpimentamos , damos unas vueltas al conjunto y dejamos que se haga a fuego medio durante unos 25-30 minutos.


Sencillo, perfecto y buenísimo!

sábado, 16 de febrero de 2013

Muffins de verduras y queso



La receta que os traigo hoy es fruto casi casi de la casualidad, o más bien del aprovechamiento de restos que tenía por la nevera.

Me apeteció algo más que un pastel de verduras, y recordé la delicia de los muffins salados; así que con unas cuantas verduras, queso fresco, huevos, harina y poco más, conseguí esta delicia de bocado, son irresistibles si os gusta tanto el queso y las verduras como a mi.


Ingredientes:

- 200 grs de verduras variadas, cortadas en juliana o dados ( yo usé zanahoria, repollo, acelgas, puerro, judías verdes...)
- 140 grs de harina
- 1/2 sobre de levadura en polvo
- 2 huevos
- 200 grs de queso fresco batido  ( usé un 0% materia grasa)
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- queso rallado
- sal
- pimienta

Preparación:

Comenzamos precalentando el horno a 200º.

En una sartén amplia calentamos el aceite, y en cuanto coja temperatura, pochamos las verduras a fuego medio, dándoles vuelta para que se sofrían uniformemente.

En un bol mezclamos el queso fresco, los huevos y un puñado generoso de queso rallado. Salpimentamos al gusto.

En cuanto estén listas las verduras, las incorporamos al bol que contiene la mezcla de huevos y quesos y removemos para que se integren todos los ingredientes.

Añadimos a esta mezcla la harina y levadura, removiendo suavemente hasta que consigamos una masa uniforme.

Vamos echando en los moldes de muffins o madalenas, una cucharada abundante de la masa y volvemos a depositar sobre cada uno de ellos un puñadito de queso rallado.

Horneamos los muffins a 200º, unos 20 minutos, vigilando que se doren pero no se quemen.

Sacamos del horno y dejamos que reposen unos 5 minutos antes de desmoldar.


Sacados del horno son deliciosos, pero incluso fríos me encantan. Siempre podemos darles un golpe de calor en el horno antes de servir.

Yo utilicé unos moldes de magdalenas que tengo de silicona, hace mucho tiempo, pero que desmoldan de maravilla y sin falta de engrasarlos para que la masa no se pegue, pero podéis usar las típicas flaneras de siempre.

Además de las verduras, podeis añadirles otro ingrediente más: carne, pollo, chorizo, bacon, jamón...eso os lo dejo a vuestra elección, pero para mí así son perfectos.

A disfrutar!!


 

martes, 12 de febrero de 2013

Cupcakes oreo


El día que descubrí estos cupcakes sabía que estaba perdida. Cupcakes, y de oreo...tocada y hundida!

No os digo nada en cuanto mi pequeña vio las fotos de los cupcakes en el blog "la república de mi cocina", estaba claro que tenía que hacerlos, y yo pensando en la operación comida saludable...

Así que ante unos días de descanso, me puse manos a la obra. Muy fáciles de hacer, no me defraudaron nada, a pesar de que tenía mis dudas con respecto al frosting. Pensé que podía resultar pesado, pero decidí hacerlo, al no llevar una cantidad exagerada de mantequilla.

En más de una ocasión os comenté que no soy amiga del butercream, me resulta pesadísimo con tal cantidad de mantequilla, por lo que prefiero frostings más suaves: el de nata y queso creo que es uno de mis favoritos, sin que sea una cupcakes adicta.

Siempre digo que me gusta más hacerlos que comerlos, será por lo fotogénicos que son. Pero me pasa más de lo mismo con el fondant, no puedo comerlo, sin embargo me gusta trabajar con él, pero sólo con pensar en morderlo, me siento incapaz...



Vereis qué fáciles y qué resultones:

Ingredientes:

*Para los cupcakes:

- 190 grs de harina
- 190 grs de azúcar
- 150 grs de mantequilla a temperatua ambiente
- 2 huevos
- 2 cucharaditas de cacao en polvo
- 1 cucharadita de levadura en polvo
- 80 grs de leche semidesnatada
- 1 cucharadita de esencia de vainilla
- 6 galletas oreo

*Para el frosting de queso:

- 400 grs de queso crema (tipo Philadelphia)
- 150 grs de azúcar glass
- 100 grsa de mantequilla a temperatura ambiente
- 6 galletas oreo

Preparación:

Comenzamos precalentando el horno a 160º.

Batimos con una batidora de varillas la mantequilla con el azúcar hasta conseguir una mezcla cremosa y homogénea.

Incorporamos los huevos uno a uno, sin agregar el siguiente hasta que no hayamos integrado bien el huevo a la masa. Añadimos la leche mezclada con la vainilla, y seguimos mezclando.

Tamizamos los ingredientes secos: harina, cacao y levadura, y los vamos añadiendo a la masa poco a poco sin dejar de batir a la velocidad más baja.

Partimos las galletas con un cuchillo, yo las dejé en trozos grandecitos, porque nos es agradable encontrarlos cuando muerdes el cupcake, y los añadimos a la masa.

Vertemos la mezcla en las cápsulas de papel, hasta llenar los 2/3 de capacidad de las mismas, y horneamos a 160º, durante unos 30 minutos.

Mientras se hornean preparamos el frosting: batimos el queso con la mantequilla y el azúcar durante varios minutos ( yo creo que lo batí sobre unos cinco, incluso algo más...), y en cuanto esté cremosa, añadimos las galletas desmenuzadas, más bien trituradas, y mezclamos.

Pasamos el frosting a una manga pastelera con boquilla rizada y dejamos en la nevera hasta que estén fríos los cupcakes.

Una vez que los sacamos del horno, los dejamos que enfríen sobre la placa unos 5 minutos, pasándolos después a una rejilla, a fin de que acaben de enfriar y no se humedezcan.

Procedemos a decorarlos con el frosting, y a disfrutar!




Os dejé la receta tal y como la vi en el blog "la república de mi cocina", que os lo recomiendo totalmente. Merece la pena que os deis un paseillo por él, ya vereis qué recetas tan buenas, y que majete mi amigo bloggero Edu (un beso desde aquí!).

De cualquier forma, creo que la próxima vez haré frosting con base de nata, me resulta mucho más agradable, y monta mucho mejor: me encanta conseguir una nata dura, para que la decoración del cupcake sea perfecta, aquí me quedo poco definida...

La decoración de los cupcakes, a voluntad, a mi me apeteció ponerles la peineta, y les coloqué un mini-oreo en la parte superior, pero eso ya va en gustos.

Con estas cantidades me salieron unos quince cupcakes como los que veis en las fotos, y sin darme cuenta...volaron!

Tengo que reconocer, que a pesar de que no soy muy fan de este tipo de dulces, estaban muy buenos. A mis hijas que les chiflan, ya se les ocurrió que los próximos sean con "Chips Ahoy...", acaban conmigo!!



sábado, 9 de febrero de 2013

Albóndigas de ternera con manzana



Como sigo con el plan comida ligera, hoy os traigo una variante de las albóndigas tradicionales: éstas tienen como base una cama de puré de manzana, que casa a la perfección con la ternera de la albóndigas. Ya sabéis lo mucho que me gusta mezclar sabores, combinaciones de salado y dulce, y ésta es una idea genial para probar cosas nuevas.

Las hice con la Thermomix, de hecho es una receta sacada de un libro de recetas ligeras, del que os voy a traer un montón de buenas recetas para que el cuidarse no tenga por qué ser aburrido. Como siempre os digo se puede hacer perfectamente de modo tradicional. No hay complicación ninguna, así que a por ellas!

 
Ingredientes:
 
- una manzana reineta
- un diente de ajo
- una cebolla
- 600 grs de carne de ternera picada
- un huevo
- sal
- pimienta
- perejil picado
- una cucharada de harina
- 3 cucharadas de aceite de oliva
 
- Para el puré de manzana:
 
- 4 manzanas reinetas peladas y troceadas
- 30 grs de jerez
- 2 cucharadas de zumo de limón
- sal
- pimienta molida
 
Preparación:
 
Pelamos la manzana, la descorazonamos y partimos en trozos.
 
Ponemos la Thermomix en velocidad 7 y dejamos caer el diente de ajo por el bocal, junto con el perejil picado. Bajamos los restos con la ayuda de la espátula y añadimos la cebolla pelada y troceada y la manzana reservada. Programamos 6 segundos, velocidad 3.
 
Agregamos la carne, el huevo batido, sal, pimienta al gusto, y mezclamos programando 15 segundos , velocidad 1.
 
Sacamos la carne del vaso y vamos formando albóndigas, de tamaño mediano. Las rebozamos por harina y las freímos en una sartén con aceite caliente, hasta que se doren.
 
Retiramos las albóndigas a una fuente con papel absorbente para eliminar el exceso de grasa.
 
Preparamos ahora el puré de manzana: para ello con el vaso limpio, introducimos todos los ingredientes del puré y programamos 2 minutos, 100º, velocidad 4.
 
Pasado el tiempo, bajamos los restos de las paredes del vaso, con ayuda de la espátula y programamos de nuevo 10 minutos, 100º, velocidad 2.
 
Una vez pasado el tiempo, trituramos el puré, durante 20 segundos a velocidad 3.
 
Servimos las albóndigas acompañadas del puré y decoradas con un poco de perejil picado.
 
 
Os las dejo tal cual, sin más acompañamiento, ya que en casa las serví de segundo plato, pero si le unís una ensalada completa, será un plato único perfecto. Ni qué decir que casa de lujo con arroz blanco, o pasta.
 
Para hacer la receta a modo tradicional, sólo tenemos que usar una batidora para la salsa, triturándola después de cocida. Cero dificultades y sabor de diez!! 
 

martes, 5 de febrero de 2013

Brócoli con bechamel de calabacín


No suele haber cosa peor cuando estamos intentando comer sano y cuidarnos, que acordarnos de esos platos que tanto nos gustan: salsas, bechameles, fritos, rebozados...

Bueno pues aunque lógicamente hay que cuidarse no ocasionalmente sino a diario, os presento un plato muy muy resultón y que os saciará sin pesaros nada de nada: unas verduras cocidas al vapor, y bañadas con una salsa ligerísima en grasa que si además os digo que es una delicia tenemos uno de esos platos perfectos.

En este caso yo opté por una versión vegetariana, sin carne ni pollo, ni pescado, pero podeis acompañarla de unos tacos de jamón, unos trocitos de pollo, o bonito, para aprovechar esos restos que tenemos por la nevera.


También perfecta con coliflor, zanahorias, champiñones...y si queremos una versión más ligera aún, buscad un queso ligero para el gratinado. Os gustará fijo. Vamos alla:
 
Ingredientes:

- 500-600 grs de brócoli
- 2 ó 3 patatas medianas
- 600 grs de calabacín pelado
- 30 grs de cebolla
- 160 grs de leche desnatada
- 30 grs de aceite de oliva
- 4 quesitos desnatados
- sal
- pimienta
- nuez moscada al gusto
- queso para gratinar


Preparación:

Comenzamos preparando el brócoli con las patatas, para ello, lavamos el brócoli, lo cortamos en ramilletes, y lo colocamos en las bandejas del recipiente varoma. Lo mismo hacemos con las patatas, después de lavarlas, las partimos en rodajas gruesas, y las colocamos en el varoma. Salpimetamos y cerramos el recipiente.

Vertemos el agua en el vaso de la Thermomix, y lo colocamos en la peana. Una vez cerrado, posicionamos el varoma sobre el vaso y programamos 35 minutos, temperatura varoma, velocidad 2.

Pasado el tiempo, comprobamos que tanto el brócoli como la patatas están bien cocidos.

Dejamos enfriar sobre una bandeja, ya que vamos a preparar la bechamel de calabacín.

Echamos el aceite en el vaso de la Thermomix, previamente seco y calentamos 3 minutos, temperatura varoma, veocidad 1. Agregamos la cebolla y los calabacines pelados y los trituramos 4 segundos a velocidad 4.

A continuación rehogamos las verduras durante 7 minutos, temperatura varoma, velocidad 1.

Incorporamos la leche y los condimentos a nuestro gusto, y cocemos la bechamel durante 15 minutos, a 100º y  velocidad  1. Pasado el tiempo, trituramos la salsa dutrante 15 segundos a velocidad 5.

Incorporamos los quesitos, y volvemos a triturar 15 segundos a velocidad 5. Comprobamos que la bechamel nos ha quedado ligada, y de no ser así programamos unos segundos más a velocidad 5.

Ya sólo nos queda bañar el brócoli y las patatas con la bechamel, espolvorear con queso rallado y gratinar a horno fuerte, durante unos minutos hasta que tome color.

Una receta deliciosa. Si veis que os queda demasiado rala la bechamel, siempre podemos ligarla con una cucharadita de maicena disuleta en un poquito de leche, y cociendo unos minutos más.

Una delicia sin remordimientos!








 

sábado, 2 de febrero de 2013

Muslitos de pollo a la Coca-Cola

 
 
 
Si, si a la Coca-Cola... ya sé que es una receta que suele ser habitual en los blogs de cocina, pero es que yo hasta que no la probé no di crédito de que saliera tan estupenda.
 
Otra idea para seguir comiendo ligerito, que este año tenemos que seguir en esa línea, muchas verdura como base de nuestras recetas, y pocos condimentos grasos, ya vereis qué delicia de plato!
 
Yo guisé muslitos de pollo, pero también la probé con pechuga de pollo y sigue siendo una receta de diez. Y en casa, por una vez y supongo que sin que sirva de precedente, esta vez no protestó nadie!
 
 
Ingredientes:
 
- 6-8 muslitos de pollo
- un pimiento verde
- un pimiento rojo
- una cebolla
- un diente de ajo
- 2 zanahorias
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- sal
- pimienta
- un vaso grande de Coca-Cola light o zero
 
Preparación:
 
Lo primero que vamos a hacer es quitarle la piel a los muslos de pollo.
 
Ponemos en un wok o sartén amplia el aceite a calentar. Vamos dorando el pollo a fuego medio y mientras picamos en trocitos todas las verduras.
 
Una vez que tengamos el pollo dorado, incorporamos la cebolla y los pimientos, y bajamos el fuego, cocinando el pollo con las verduras.
 
Agregamos la zanahoria en dados, y sazonamos con sal y pimienta. Tapamos el wok y dejamos que se vaya haciendo el pollo y las verduras a fuego lento. Si vemos que necesitamos un poquito de caldo, echamos un poco de agua.
 
Cuando el pollo esté a media cocción añadimos la Coca-Cola, dejamos reducir y que acabe de cocerse, y servimos.
 

El acompañamiento os lo dejo al gusto; casa de maravilla con unas patatas asadas o cocidas, con un socorrido arroz blanco, o ideal con una ensalada variada...
 
No me digáis que no estamos cocinando sano, ligero...y delicioso!